martes, 11 de agosto de 2015

Globos blancos


Redactado el 17 de Junio de 2015
Pocos saben lo que ocurre en la vida del resto de las personas, incluso si son familiares y hoy, estoy arrepentida por eso.

Les voy a platicar la historia de un tío, que pocas veces daba un beso de verdad, Él era de ese porcentaje de la población que solo pone el cachete pero siempre tenía 3 golpecitos en la cabeza acompañados de un “ánimo mija” o un “tranquila” para quien lo necesitara. Siempre supe que su labor era muy importante, que podía llenar un templo aunque su misa durara 2 horas y de niña esto de verdad me sorprendía… en estos últimos días me di cuenta que su labor iba mucho mas allá de lo que alguna vez pude imaginar. Después de luchar 4 semanas en terapia intensiva, se nos adelantó para ahora encargarse de otros pendientes en el cielo.

Todo este último mes tuvo un valor sentimental indescriptible y guió a platicas que probablemente no hubiera tenido nunca, unió aún mas a mi familia y se nos hinchó el corazón de tanto amor, de saber que su vida marco la de tantos y al mismo tiempo sentía un dolor profundo de no haber estado presente en todos sus proyectos; aún así puedo decir que los planes de Dios son perfectos.

Cuándo me informaron que la misa de cuerpo presente sería en el estadio de béisbol, me quedé sorprendida, pasaron muchas horas y se llegó el día, el momento de despedirlo… “Muchos decían que estabas enfermo del corazón Padre Edgar y yo digo que fue lo que mejor te funcionó, el corazón si te funcionó muy bien” esta fue una partecita de la homilía que me lleno de una profunda tristeza / satisfacción; al terminar la misa nos fue entregado un globo blanco, en el que debíamos depositar todo aquello que no alcanzamos a decir para después soltarlo y despedirnos de Él.

Todos tenemos la respuesta perfecta para un chorro de preguntas, incluyendo ¿Qué nos llevamos al morir?  pero siempre me quedaba helada al pensar ¿Qué pasa cuando tu alma abandona tu cuerpo? o ¿Cómo es llegar al cielo? y en estos días la escuché:

“Llegar al cielo es toda una fiesta; es como la inauguración de las olimpiadas cuando entran los corredores al estadio cargando el fuego olímpico y entre ovaciones todo el público se pone de pie y te aplaude...  porque ha sido una muy buena carrera”

Al salir del estadio, se decidió dar esa última vuelta olímpica, para que las personas de las gradas pudieran despedirse y entre aplausos, porras, gritos llenos de amor y el cielo pintado con globos blancos, partimos al monasterio para enterrarlo, como Él lo había pedido. 

Muchos (incluyendo a mi hermana mayor) me preguntan por que no lloré y no siempre el que no llora es el más fuerte, al contrario, puedo llorar con pedidas de matrimonio y buenos libros, pero a mi la muerte de un ser querido me llena de una extraña clase de alegría por que confío que en la siguiente etapa de la vida no tendré que despedirme de ellos jamás…y ahora también puedo decir que tendré un público espectacular en primera fila cuando sea mi momento de llegar al cielo.

Gracias por tanto tío, nos vas a hacer mucha falta.

pd. https://www.youtube.com/watch?v=X5J9FIX5pr8


5 comentarios:

  1. Me encanta la forma en que escribes, me llegaron todas tus palabras ¡¡¡sigue escribiendo!!!

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  2. Wooaoooo!! Belllísimo!!! me hiciste recordar tantas cosas mi mi mado Padre Edgar Larrea!!! una bendición enorme haberlo conocido!!!
    un abrazo en Cristo!!

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  3. Tus palabras me han conmovido mucho, de verdad gracias por compartir tus bellos y sinceros pensamientos, recibe un abrazo y un beso.

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  4. Tus palabras me han conmovido mucho, de verdad gracias por compartir tus bellos y sinceros pensamientos, recibe un abrazo y un beso.

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  5. Tus palabras me han conmovido mucho, de verdad gracias por compartir tus bellos y sinceros pensamientos, recibe un abrazo y un beso.

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